Putin anuncia producción masiva del poderoso misil Oreshnik
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, confirmó la producción en serie del nuevo misil balístico "Oreshnik", un armamento que fue utilizado por primera vez la semana pasada en un ataque contra Ucrania.
Durante su participación en un foro de la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC) en Kazajistán, Putin aseguró que un bombardeo masivo con estos misiles tendría efectos comparables al de una bomba nuclear.
El mandatario justificó este desarrollo armamentístico como una respuesta a las "amenazas" provenientes de países occidentales y al uso de misiles de largo alcance por parte del ejército ucraniano, que han sido proporcionados por Estados Unidos. Según Putin, Rusia no solo conoce cuántos misiles ATACMS ha recibido Ucrania, sino también sus posiciones estratégicas.
Este jueves, el presidente ruso reivindicó un ataque masivo contra Ucrania con el lanzamiento de 90 misiles y 100 drones explosivos, alcanzando 17 objetivos, principalmente infraestructuras energéticas. Como resultado, más de un millón de hogares ucranianos quedaron sin electricidad. "Siempre responderemos a los ataques contra nuestro territorio", afirmó Putin, quien señaló que los recientes bombardeos son una réplica directa al uso de misiles estadounidenses en territorio ruso.
El conflicto entre Rusia y Ucrania, que comenzó en febrero de 2022 con la invasión rusa, se ha intensificado en las últimas semanas. Ucrania, respaldada por Estados Unidos, ha incrementado su uso de armamento avanzado, mientras que Moscú refuerza su arsenal bélico. Putin destacó que la capacidad de producción militar de Rusia es "diez veces mayor" que la de todos los países de la OTAN y planea incrementarla entre un 25 % y un 30 % para el próximo año.
Además de los ataques masivos, Putin criticó al gobierno de Volodímir Zelenski, calificándolo de "ilegítimo" debido a la ausencia de elecciones en Ucrania. El mandatario ruso subrayó que el ataque con drones del miércoles también formó parte de su estrategia de represalia frente al uso de misiles occidentales.
Por su parte, las autoridades ucranianas han señalado que estos ataques rusos no solo tienen un impacto devastador en la infraestructura, sino que también afectan gravemente a la población civil. La pérdida de electricidad en medio del invierno agrava la crisis humanitaria en Ucrania, que enfrenta temperaturas extremas y falta de recursos básicos.
El uso del misil "Oreshnik", considerado hipersónico y de alta precisión, marca un nuevo capítulo en la escalada bélica entre Rusia y Ucrania. La comunidad internacional observa con preocupación el aumento en la sofisticación y el alcance de los ataques, mientras las tensiones entre ambos países parecen lejos de resolverse.
