Payasos entre risas y lamentos; así sobrellevaron pandemia

Entre risas y lamentos, payasos de profesión se han visto afectados por la llegada del coronavirus, el encierro y la falta de eventos, y por si fuera poco, este año fue el peor para todos aquellos trabajos que dependían de las fiestas en familia y la diversión.

"Nos afectó porque nos cancelaron varios eventos, antes de la pandemia. Y pues obviamente por todas las restricciones que hay, pues no hay fiestas, los salones pues obviamente no nos dejan trabajar."

Ante la falta de eventos, varios payasitos tuvieron que buscar una nueva manera de sobrellevar sus gastos, pero para Kika Moon esto no fue un problema. 

"Pues también no soy payasita solamente, también soy docente de preescolar, pero pues también no hay escuela y ahora es todo en línea, y pues ya sabes, hay que buscarle."

Las afectaciones que la pandemia ha dejado a su paso no sólo son económicas, también, para estos profesionales de la risa, son emocionales. 

"No solamente esto es un trabajo, es como que, es algo bonito, es la convivencia con la gente y sobre todo con los niños. Ya estabas acostumbrada a oír sus risas en las fiestas, a ser idolatrada por los niños, y de repente pues no escuchar eso pues obviamente sí te entristece, sí te llena de frustración no poder hacer lo que te gusta."

Kika Moon es una de las tantas payasitas del gremio que se ha ganado los corazones de muchos niños, y a pesar de que en el campo laboral predominan los payasos varones, ella se dice afortunada por el trabajo que ha hecho. 

"Pues como todo, es diferente el trabajo de una payasita a un caballero, pues obviamente uno es más tierna tiene más tacto con los niños.

Se hacen cosas que los niños pueden interactuar con uno como mujer, eso es lo que cambia de un trabajo de una mujer payaso a un hombre payaso."

La apertura de eventos sociales ante los nuevos decretos del Estado vislumbran una luz al final del camino para payasos y payasitas que esperan seguir contagiando la risa a todos los niños.