De 508 niños que se encuentran a cargo del Sistema para el Desarrollo Integral para la Familia (DIF) en Querétaro, únicamente cuatro han sido adoptados en el presente año, además de que los menores que se encuentran en resguardo del DIF, llegaron derivado de denuncias por omisión de cuidados y violencia; pues estas son las dos principales causas; pero aunque 85% de los menores que llegan al DIF sí son restituidos a sus núcleos familiares; 15% se quedan en la institución y es derivado de casos incluso de violencia o trata, y así lo dio a conocer el titular de la Procuraduría de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes del Sistema Municipal para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) en Querétaro Manuel Hernández Rodríguez.
RETENCIONES POR EL DIF
En este sentido el procurador también dio a conocer que tienen una coordinación que se llama ANNA (Atención a Niños, Niñas y Adolescentes), que cuenta con 3 centros de día ubicados en Lomas de Casa Blanca, La Cruz y Nueva Realidad; siendo estos espacios destinados a atender a los menores para evitar que sean explotados con trabajo infantil sobre todo en mercados
Por último el procurador manifestó que se tiene también la prevención de adicciones, trato si violencia, resolución de conflictos y escuela para padres; pues se trata de mejorar las condiciones de familia desde el tejido social y estas situaciones también se pueden controlar y tratar si se solicita el apoyo directamente con el ADIF o a través de las jornadas estatales o municipales; pues la dependencia apoya en los 18 municipios; aunado a q2ue en estas jornadas que es cuando más les llegan reportes de abuso o alguna situación que pone en riesgo a menores; lo primero que hace el DIF estatal, es revisar su núcleo familiar para verificar las condiciones y poder comprobar si hay alguien que se pueda hacer cargo del menor; pero en caso de que los familiares tampoco sean aptos para poder restituir al menor al núcleo familiar; es cuando se tiene que empezar con un proceso en un juicio para quitarle la patria potestad a los padres agresores.