Luis Miguel Osorio Chacín, un venezolano de 45 años, fue asesinado en Cúcuta, Colombia, junto a su hijo y uno de sus escoltas. Este sujeto estaba señalado por liderar una banda dedicada al robo de relojes de lujo en varios países, incluido México, específicamente en Querétaro, donde había realizado varios atracos.
El ataque en el que murió Osorio Chacín fue directo y dejó más de 50 casquillos de armas de alto calibre. En Querétaro, autoridades aún investigan los recientes robos de relojes de alta gama y los posibles vínculos de la célula criminal que operaba bajo su liderazgo.