El Vicario general de la Diócesis de Querétaro, Martín Lara Becerril, señaló que la nueva costumbre de preparar los altares para las mascotas no es parte de la fe católica, puesto que solo el ser humano, redimido por la resurrección de Cristo tiene un alma inmortal, no así las criaturas, como en el caso de los animales de compañía
Recalcó que, si bien se le tiene un cariño muy especial a las mascotas, no cuentan con alma inmortal. Así mismo, dijo que la riqueza cultural es precisamente el recordar a los seres queridos, por lo que no se debe de tergiversar esta tradición con algo diferente.
Recordó que las fechas de la iglesia son el 1 de noviembre, la festividad de todos los santos y el 2 de noviembre, a los fieles difuntos.