Dentro de la reestructuración que está realizando la Unidad de Control Animal y los proyectos que tienen para certificar los procesos de captura y atención, por día se llegan más de 40 llamadas a este centro para reportar crueldad animal, que va desde animales en azoteas, mascotas amarradas bajo el rayo del sol sin agua ni comida y más alarmante aún, las autoridades reportan que las peleas de perros cada vez son más clandestinas y lamentablemente estas prácticas no cesan