Derivado de los cateos que fiscalía general del estado realizó hace una semana en negocios dedicados a la compra de chatarra y que esto terminara con la suspensión de varios locales debido a que la autoridad encontró que estaban comprando tapas de alcantarillas, cables robados y cobre; esta mañana los propietarios de los negocios afectados se manifestaron sobre los carriles centrales de Bernardo Quintana con la intención de llegar hasta palacio de gobierno y exigir a las autoridades que reabran sus centros de trabajo.
Si bien muchos chatarreros están conscientes de que el comprar estos materiales es un delito federal, hay personas que siguen comprándolos y por ello; las autoridades tomaron la determinación de cerrar, pero los chatarreros afirman que es poco lo que tienen de ganancia y que esta medida los afecta aún más.