Hacen filas para comprar aguas frescas y nieves; el intenso calor que se siente ha hecho común ver a personas esperar su turno a las afueras de neverías que se han convertido en verdaderos oasis.
Los clientes tienen que esperar a tomar su turno y lo hacen con gorras y sombrillas; algunos aprovechan para llevar hasta dos litros de agua y poder tener una reserva en casa para tomarla antes de dormir de acuerdo a versiones recabadas con varios de ellos.