La Bolsa Mexicana de Valores (BMV) comenzó la jornada de este viernes con un descenso, aunque se perfilaba para cerrar la semana con ganancias tras una serie de días de alta volatilidad.
El índice líder S&P/BMV IPC, que agrupa a las principales acciones del mercado mexicano, cayó un 1.20 por ciento, situándose en 51,684.12 puntos. Sin embargo, a lo largo de la semana, el índice acumuló una ganancia del 2.1 por ciento, reflejando la resiliencia del mercado ante la incertidumbre generada por la victoria electoral de Donald Trump en Estados Unidos.
En el lado negativo, las acciones de Gruma, la empresa especializada en la producción de tortillas y harina de maíz, encabezaron las pérdidas, cayendo un 2.86 por ciento, hasta alcanzar los 356.79 pesos. Por su parte, los títulos del gigante minero Grupo México también experimentaron un retroceso de 2.45 por ciento, cotizando a 106.97 pesos. La semana de volatilidad continuó afectando la confianza de los inversionistas, que siguen evaluando las posibles implicaciones de la política económica de Trump para la región.
Mientras tanto, en el mercado internacional, Nissan Motor enfrentó un desplome significativo en la Bolsa de Tokio. Las acciones de la automotriz japonesa cayeron un 6.04 por ciento, al cierre de la jornada, después de que la empresa anunciara un recorte de 9,000 empleos a nivel global y una reducción en su producción debido a la caída en su rentabilidad. Durante la jornada, los títulos de Nissan llegaron a bajar hasta un 10 por ciento, alcanzando su nivel más bajo desde octubre de 2020.
En Wall Street, los mercados mostraron una apertura mixta, tras varios días de euforia impulsada por la victoria de Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos. El Dow Jones subió un 0.31 por ciento, mientras que el Nasdaq, compuesto por las principales empresas tecnológicas, perdió un marginal 0.05 por ciento. Por su parte, el S&P 500 también registró un leve aumento de 0.12 por ciento. Los inversionistas continuaron digiriendo las implicaciones económicas de la victoria de Trump, junto con la reciente decisión de la Reserva Federal de recortar las tasas de interés en un cuarto de punto porcentual, ubicándolas entre el 4.50 y el 4.75 por ciento.
Este recorte, decidido de manera unánime por el Comité de Mercado Abierto de la Reserva Federal (Fed), sigue a un recorte de medio punto porcentual realizado en septiembre. Esta serie de ajustes en las tasas de interés forma parte de la flexibilización de la política monetaria iniciada por la Fed en respuesta a la desaceleración económica global. Los mercados, en su mayoría, recibieron con cautela la noticia, mientras continúan evaluando el impacto a largo plazo de estas decisiones y la incertidumbre política generada por la nueva administración en Estados Unidos.