La regidora de Morena en el municipio de Querétaro, Ivonne Olascoaga Correa, informó que se tuvieron las primeras reuniones entre vecinos y comerciantes de la avenida Zaragoza con autoridades de la Secretaría de Movilidad y de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, en las que se consiguieron acuerdos iniciales para resolver los problemas de movilidad, estacionamiento y asaltos en la zona del tanque de agua a Bernardo Quintana.
Los comerciantes y vecinos se acercaron hace días a la regidora para solicitar su apoyo con gestiones ante las instancias municipales, debido a que en la zona hay muchas personas adultas mayores que se ven afectadas por las condiciones de inseguridad, así como con problemas de estacionamiento en la entrada a sus viviendas y negocios, además de infraestructura publicitaria que dificulta el paso peatonal.
Entre los primeros acuerdos se informó que se analizará la posibilidad de que los vecinos y comerciantes puedan estacionarse en batería, se acabará con las infracciones de tránsito injustificadas y habrá tolerancia para los clientes de los negocios, sin complicar la movilidad en la zona; también se realizarán recorridos en la zona y se mostrará a los ciudadanos la manera en la que opera el C4 para generar confianza.
Olascoaga Correa reconoció la disposición de las autoridades de las instancias municipales responsables para llevar a cabo el encuentro y conocer la molestia ciudadana, frente a los incidentes de inseguridad que se presentaron en esa zona y que los llevaron a organizarse para exigir atención.
"Los vecinos están muy organizados, tienen proyectos propios para reducir los riesgos de inseguridad, saben que hay problemas de movilidad, pero quieren hacer todo de la mano de las autoridades y esa es la fórmula que nos funciona. Necesitaban ser escuchados, estaban muy molestos y ahora tienen las puertas abiertas, hay que reconocer esa disposición de las autoridades municipales, pero también las ganas de actuar de los ciudadanos que quieren vivir mejor en esta ciudad", declaró la regidora.
Los vecinos plantearon la posibilidad de establecer un mecanismo de alarma entre los comercios, así como analizar la posibilidad de compartir sus propias cámaras de video de seguridad con las autoridades del municipio de Querétaro, si se considera pertinente.