Para quienes tienen que caminar por la lateral de Bernardo Quintana, de Bolaños al río Querétaro, enfrentan el riesgo de ser atropellados, ya que no hay banquetas transitables y con las obras de modificación de Bernardo Quintana el espacio se reduce drásticamente, además los contratistas obligan a la gente a caminar pegados al muro lo que representa un riesgo para quienes caminan por la zona.