La Secretaría de Salud (SESA) del estado de Querétaro, se adhiere cada tercer viernes de marzo desde 2008 al Día Mundial del Sueño, fecha organizada por la Asociación Mundial de Medicina del Sueño y este año el lema es "El sueño es esencial para la salud".
Todos los expertos están de acuerdo en que, al igual que la buena alimentación y el ejercicio físico moderado, el sueño de calidad es un hábito fundamental para el bienestar físico, mental y social.
El objetivo del día es sensibilizar a la población sobre la importancia de dormir bien y las consecuencias de no hacerlo, las cuales son un factor de riesgo de diversas enfermedades y reduce de forma significativa la calidad de vida.
El sueño es un proceso biológico complejo, ya que, mientras se duerme, las funciones del cerebro y cuerpo siguen activas para mantener saludable al cuerpo. Los trastornos del sueño afectan a cerca del 40 por ciento de la población mundial, de acuerdo con datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Las horas que se recomienda dormir cambian de acuerdo con la edad de las personas:
Recién nacidos: 18 horas
Niñas y niños: Entre diez y doce horas
Adolescentes: Entre ocho y nueve horas
Adultos: Entre siete y ocho horas
Dormir de forma adecuada es esencial para tener buena salud, ya que la falta de sueño está asociada con accidentes automovilísticos, desastres industriales, errores médicos y profesionales, así como baja productividad. Además, no dormir lo necesario también puede ser un factor de riesgo para desarrollar enfermedades crónicas como obesidad, hipertensión, diabetes y depresión.
Existen más de 100 trastornos diferentes de sueño y se pueden agrupar en cuatro categorías:
Problemas para conciliar el sueño y permanecer dormido (insomnio). Estos episodios pueden aparecer y desaparecer, asimismo pueden tener una duración temporal o ser crónicos.
Somnolencia diurna excesiva (problemas para permanecer despierto). Este trastorno también se llama hipersomnio y es cuando la persona se siente cansada todo el día; puede deberse a algunos padecimientos o problemas en el cerebro. Cuando no se puede encontrar ninguna causa para la somnolencia, se denomina hipersomnio idiopático. Otros trastornos dentro de esta categoría son narcolepsia (problema del sistema nervioso que causa somnolencia extrema y ataques de sueño durante el día) y síndrome de apnea de sueño (trastorno común en donde la respiración se interrumpe y la persona no descansa bien).
Problemas para mantener un horario regular de sueño (problema con el ritmo del sueño). Se presenta cuando no se mantiene un horario constante de sueño y de vigilia, por ejemplo, en las personas que tienen horario nocturno o cuando se realizan viajes con diferente zona horaria. Algunos trastornos dentro de esta categoría son el síndrome de sueño y vigilia irregulares, síndrome del desfase de horario, trastorno del sueño a causa del trabajo por turno, fase de sueño retrasada o avanzada, entre otros.
Comportamientos inusuales durante el sueño o parasomnio. Son más comunes en las y los niños. Algunos de estos son sonambulismo (trastorno que se da cuando la persona camina o realiza otras actividades estando dormido), terrores nocturnos o pesadillas.
Para tener una buena higiene del sueño se recomienda:
Acostarse y despertarse a la misma hora todos los días.
Realizar actividad física moderada para promover el sueño; sin embargo, debe evitarse el ejercicio, al menos tres horas antes de dormir.
Evitar comidas excesivas antes de acostarse.
Cerca de la hora de dormir evitar el consumo de cafeína, alcohol y tabaco.
Estar en un espacio cómodo, oscuro, tranquilo y que no esté demasiado cálido, ni muy frío.