Zaporiyia bajo ataque ruso: Cuatro muertos y decenas de heridos
El Servicio Estatal de Emergencia de Ucrania reportó el fallecimiento de al menos cuatro personas y 18 heridos tras un ataque aéreo llevado a cabo por las fuerzas rusas en la provincia de Zaporiyia
Este ataque ha sido calificado por las autoridades ucranianas como un "nuevo crimen de guerra", mencionando que la infraestructura civil ha sido nuevamente blanco de los bombardeos rusos. Los equipos de rescate lograron rescatar a dos menores de entre los escombros, aunque se teme que aún haya más personas atrapadas bajo los restos de los edificios afectados.
El presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, utilizó este incidente para reiterar su llamado a los aliados internacionales, pidiendo apoyo para que las Fuerzas Armadas de Ucrania puedan realizar ataques de largo alcance en territorio ruso. Zelensky enfatizó que cada ataque ruso no solo causa muertes y devastación, sino que también elimina cualquier posibilidad de diálogo con Moscú. "Ellos disfrutan matando gente", expresó.
En un ataque separado, el Ejército ruso bombardeó un edificio residencial de cinco plantas en Mikoláivka, en la región de Donetsk, resultando en al menos dos muertes y cinco heridos. Según el gobernador local, Vadim Filashkin, el proyectil impactó directamente en el edificio y causó daños a otras cuatro viviendas cercanas.
Las autoridades ucranianas han advertido que estos actos no solo son una violación del derecho internacional, sino que también afectan gravemente a la población civil y su bienestar
El conflicto entre Ucrania y Rusia tiene sus raíces en una larga historia de tensiones geopolíticas y disputas territoriales. El 24 de febrero de 2022, Rusia inició una invasión a gran escala bajo el argumento de llevar a cabo una "operación militar especial" destinada a proteger a las poblaciones rusohablantes y desmilitarizar Ucrania, lo que llevó a una escalada mayor del enfrentamiento.
Los bombardeos y ataques militares son una consecuencia directa de esta invasión lo que derivó en la guerra actual. Rusia utiliza bombardeos para debilitar la infraestructura militar y civil de Ucrania, intentando socavar su capacidad de resistencia y forzar concesiones políticas. Por su parte, Ucrania emplea ataques, incluyendo bombardeos, para defender su territorio y contrarrestar las fuerzas rusas.