En su primera visita como presidenta de México a Salamanca, Claudia Sheinbaum Pardo inauguró la nueva Central de Ciclo Combinado de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), una de las más avanzadas a nivel mundial. Durante su discurso, la mandataria enfatizó la importancia de la soberanía energética y la independencia nacional, declarando que México no cederá sus recursos a ningún interés extranjero.
Sheinbaum destacó que la industrialización del país no debe comprometer los recursos naturales ni el patrimonio nacional, subrayando la reciente modificación constitucional que revierte la reforma energética de 2013, la cual, según sus palabras, había perjudicado profundamente a México.
La presidenta realizó un recorrido por las instalaciones de la nueva Central de Ciclo Combinado, donde se develó una placa conmemorativa marcando el inicio de una era de mayor confiabilidad en la Red Nacional de Transmisión.
Esta moderna infraestructura evitará la emisión de 3.5 millones de toneladas de dióxido de carbono anualmente, equivalente a sacar de circulación 750 mil automóviles, y reducirá el consumo de agua en 7.8 millones de metros cúbicos al año.
Construida con tecnología de punta y utilizando gas natural como combustible limpio, la nueva central no solo protege el equilibrio ecológico, sino que también contribuye significativamente a la transición energética de México. La antigua Central Termoeléctrica de Salamanca, que sirvió al país durante 55 años, quedó fuera de servicio con el inicio de operaciones de este nuevo ciclo combinado.