DeepSeek, un modelo de inteligencia artificial (IA) originario de China, ha logrado una ascendente y sorprendente presencia en el mercado tecnológico al alcanzar el primer puesto en las aplicaciones más descargadas para teléfonos móviles.
Con este avance, el chatbot chino está generando temblores en las bolsas de valores y poniendo en alerta a gigantes estadounidenses como Nvidia y Meta, que invirtieron miles de millones para liderar el sector de la IA.
Desarrollado por una "start-up" con sede en Hangzhou, una ciudad con un alto índice de concentración tecnológica, DeepSeek se ha destacado por ofrecer una amplia gama de funcionalidades similares a las de sus competidores estadounidenses.
La aplicación puede redactar canciones, ofrecer consejos sobre situaciones cotidianas o incluso sugerir recetas con los ingredientes disponibles en la nevera. Además, aunque el sistema es fluido en inglés y chino, presenta limitaciones al abordar temas políticos sensibles, como el presidente Xi Jinping, sobre los cuales prefiere cambiar de tema.
Lo que más ha llamado la atención de los expertos es su notable capacidad para resolver problemas matemáticos complejos y abordar cuestiones técnicas con eficacia. Alexandr Wang, director ejecutivo de Scale AI, una empresa estadounidense, calificó a DeepSeek como "el mejor" o "a nivel de los mejores modelos estadounidenses".
Este desempeño es aún más sorprendente cuando se considera que el modelo de DeepSeek se desarrolló con una inversión significativamente menor en comparación con las grandes empresas tecnológicas de Occidente.
La cifra invertida por DeepSeek para el desarrollo de su modelo fue de sólo 5.6 millones de dólares, un monto ínfimo en comparación con los miles de millones que han destinado las compañías tecnológicas de Estados Unidos.
Este bajo costo de producción ha tenido un impacto directo en los mercados bursátiles: Nvidia, líder mundial en componentes y programas para la IA, vio sus acciones caer un 3% en Wall Street, mientras que el gigante japonés SoftBank, inversor en un proyecto estadounidense de 500,000 millones de dólares en infraestructuras de IA, perdió más de un 8%.
A pesar de competir con modelos privados como los de ChatGPT, Llama o Claude, DeepSeek se distingue por usar un modelo de código abierto. Esto significa que cualquier usuario puede acceder al código de la aplicación, comprender su funcionamiento y modificarlo.
Este enfoque, a diferencia de sus competidores que desarrollan modelos cerrados, refleja la misión original de OpenAI, que apuesta por una investigación abierta en beneficio de todos, según Jim Fan, responsable de investigación en Nvidia.
El éxito de DeepSeek es un reflejo del ambicioso plan de China para convertirse en líder mundial en inteligencia artificial para 2030, con una inversión prevista de miles de millones de dólares en los próximos años. La semana pasada, el fundador de DeepSeek, Liang Wenfeng, se reunió con el primer ministro chino, Li Qiang, lo que subraya el ascenso meteórico de esta empresa que ya empieza a superar los obstáculos tecnológicos y políticos que enfrentaban las empresas chinas en este campo.
Este crecimiento de DeepSeek pone de manifiesto que las empresas tecnológicas chinas están alcanzando una competitividad nunca antes vista, desafiando el dominio que hasta ahora habían mantenido las grandes compañías estadounidenses en el sector de la inteligencia artificial.