Concepción Martínez, directora del Centro de Día para Migrantes Jesús Torres, ofrece una mirada profunda sobre la realidad que enfrentan miles de migrantes en su paso por Torreón. En entrevista con Luis Amatón, Conchita revela las historias de esperanza y lucha que llegan diariamente a este centro, donde el destino final de los migrantes es el sueño americano.
A pesar de las políticas cada vez más restrictivas por parte del gobierno de Estados Unidos, que recientemente canceló citas esenciales para los migrantes, la necesidad de llegar a la frontera sigue siendo una constante. Concepción comenta que, a pesar de las decepciones generadas por los cambios en las políticas, la determinación de los migrantes sigue firme. "Ellos continúan su camino, sin importar los obstáculos, con la esperanza de cambiar sus vidas y salvarse", dice.
La mayoría de los migrantes que llegan a Torreón provienen de Venezuela, un país donde la situación política y económica ha llevado a millones a tomar la decisión de abandonar su hogar. Lo sorprendente es que, en los últimos tres años, ha habido un notable aumento de familias enteras que migran juntas, muchas de ellas acompañadas por sus mascotas, especialmente perros, que se han convertido en parte esencial de su viaje. Concepción destaca cómo los migrantes ven a sus animales como un símbolo de pertenencia y resistencia, incluso más allá de la incertidumbre y el peligro que enfrentan en su travesía.
La directora también comparte los desafíos emocionales que enfrenta el equipo del Centro de Migrantes, que interactúa con personas de diversas culturas y con historias de vida desgarradoras. La moral del equipo, a pesar de los retos, se fortalece a través del acompañamiento espiritual proporcionado por el padre Miguel Peón, así como el apoyo de organizaciones que brindan formación para cuidar a los que cuidan.
Concepción subraya que el trabajo de la Casa del Migrante no solo se trata de brindar apoyo material, sino también de ofrecer un refugio emocional y espiritual, donde la esperanza nunca se pierde.