Sheinbaum y los presidentes de México en la historia
Este martes 1 de octubre, Claudia Sheinbaum Pardo asume la presidencia de México, convirtiéndose en la primera mujer en ocupar este cargo desde que el país se estableció como República independiente. Su llegada al poder se produce tras una victoria contundente en las elecciones del pasado 2 de junio, donde recibió un amplio respaldo ciudadano.
La historia de la presidencia en México se remonta a 1824, cuando Guadalupe Victoria se convirtió en el primer presidente del país, después de la promulgación de la Constitución política. Desde entonces, México ha vivido distintos momentos históricos, incluyendo períodos de monarquía y regencias, así como varias reformas políticas que han cambiado la estructura del poder ejecutivo.
A lo largo de su historia, México ha tenido presidentes constitucionales, interinos, sustitutos, provisionales y de facto. La clasificación de estos líderes refleja la complejidad de la política mexicana y su evolución. Desde los primeros presidentes, como Agustín de Iturbide y Vicente Guerrero, hasta la actual administración, el país ha experimentado una serie de cambios significativos en su gobierno.
La transición de la monarquía a la república se produjo en varias etapas. Entre 1821 y 1823, México vivió una primera regencia, seguida de un gobierno provisional que culminó en la creación de una república federal. A partir de 1857, con la implementación de la nueva Constitución, el país estableció un sistema de gobierno más sólido y definido, en el cual el titular del poder ejecutivo fue denominado oficialmente como Presidente de los Estados Unidos Mexicanos.
Desde la Reforma hasta el Porfiriato, México ha pasado por diversos períodos políticos, incluidos el turbulento tiempo de la Revolución Mexicana y la consolidación del Partido Revolucionario Institucional (PRI) como dominante en la política mexicana. Durante el siglo XX, el país experimentó cambios importantes, como la llegada de Vicente Fox y Felipe Calderón del Partido Acción Nacional (PAN), marcando el inicio del pluralismo político en el país.
La presidencia de Sheinbaum no solo representa un cambio de liderazgo, sino también un símbolo de avance en la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres en la política. Durante su mandato, que se extenderá hasta el 30 de septiembre de 2030, se espera que aborde diversos desafíos, incluidos el desarrollo social, la economía y la justicia.
En sus primeras declaraciones, Sheinbaum ha expresado su compromiso de gobernar para todos los mexicanos y de continuar con la "cuarta transformación" que inició Andrés Manuel López Obrador. Con la mirada puesta en el futuro, su presidencia es vista como una oportunidad para unir al país y construir un México más equitativo y justo.