En opinión del ingeniero ambiental Mario Alberto Ortíz la construcción del puente Tuxpan-Peñas, luego de su destrucción en 2018 tras el paso del huracán Willa, fue un "mejoralito" para salir de la dificultad y se optó por una obra más económica para restablecer la comunicación hacía la cabecera municipal de Tuxpan. sin embrago una obra como esta puede resultar, a largo plazo, más costosa que construir un puente adecuado para la situación que se enfrentará en próximos años debido al cambio climático y la consecuente crecida del río San Pedro. "esa medida puede ser útil en un evento allá cada 200 años, cada 500 años; ahora no el fenómeno lo tenemos cada 3, 4, 5 o 10 años entonces estar terraplenando pues a la larga va a salir más caro entonces ahí se debería pensar en una solución más sustentable qué es ponerle un puente muchísimo más ancho de concreto y que sirva permanentemente para el flujo de las aguas durante las crecidas de esa manera nos vamos a ahorrar el desplazamiento de materiales y mano de obra y el suspender ahí el tráfico", explicó.
Dijo también que, las autoridades deberían pensar en obras con adaptación al cambio climático, una realidad que no se considera a la hora de establecer los desarrollos poblacionales, "Yo soy de la idea de que debería de tomarse en cuenta como medida de adaptación al cambio climático poner un puente con sus dimensiones como lo señala la hidrodinámica. Es cuestión de diseñarlo, es cuestión de sentarse con un gabinete, de ver los flujos de agua, entonces ya el mismo flujo de agua nos dirá de cuánto ancho tiene que ser el puente y qué tan alto además", agregó.