López Obrador dejará en privado su testamento político
El presidente Andrés Manuel López Obrador ha decidido no hacer público su testamento político tras consultar a su familia. En la conferencia matutina de ayer en Palacio Nacional, el mandatario reveló que sus seres queridos no están de acuerdo con que se divulgue el contenido de este documento.
Durante su intervención, el presidente mencionó: "Ahora que escuché lo del museo, no quiero dar a conocer mi testamento, porque mi familia me dice que no, no están de acuerdo. Pero es que ahí, a mí me gustaría dar a conocer, porque ahí hablo, escribo, dicto, de que no quiero museos, ni estatuas, ni en nombre de calles, ni escuelas".
López Obrador se encuentra a solo 12 días de entregar la banda presidencial y ha manifestado su intención de retirarse a Palenque para dedicarse a la escritura y el estudio. En este sentido, ha pedido a sus amigos y seguidores que respeten su deseo de no ser buscado en su nueva vida privada. "Lo único que pido es que ya no me busquen, porque donde voy a estar en Palenque me voy a dedicar a escribir", afirmó. También enfatizó que su objetivo es explorar la grandeza cultural de México y reconocer la influencia de sus antepasados ??en la identidad nacional.
En algunos casos, el testamento político sirve como una especie de hoja de ruta para los sucesores o aliados del líder, ofreciendo directrices sobre cómo mantener o preservar un proyecto o ideología.
El testamento político de López Obrador es un documento extenso, con más de 500 páginas, donde aborda temas cruciales para el país. En él se expresa sobre su visión del futuro político y social de México, así como sobre los errores y aciertos durante su administración. En el cierre del libro "¡Gracias!", publicado recientemente, ofrece disculpas a sus adversarios y reflexión sobre su legado personal y político. "Nunca pensé en hacer daño y me retiro sin odiar a nadie", mencionó.
A lo largo de su mandato, López Obrador ha sido un personaje polarizador en la política mexicana. Su estilo directo y sus críticas hacia los expresidentes del PRI y del PAN han generado tanto apoyo como oposición. En sus reflexiones finales, reconoce haber enfrentado momentos difíciles y haber sido víctima de fraudes electorales en 2006 y 2012.
En cuanto a su sucesión presidencial, López Obrador ha dejado claro su apoyo incondicional a Claudia Sheinbaum Pardo como la próxima presidenta constitucional. En varias ocasiones ha mencionado que confía plenamente en ella para continuar con el proceso de transformación del país. "Claudia Sheinbaum representa una auténtica garantía de que tendremos un futuro de más justicia y más honestidad", afirmó.
Por otro lado, el presidente también ha hecho hincapié en que tras dejar el cargo no mantendrá relación con ninguna autoridad, salvo con Sheinbaum si decide visitarlo. "Ya no voy a tener ninguna relación con ninguna autoridad", reiteró. Esta decisión parece estar alineada con su deseo de mantener una distancia del ámbito político una vez concluido su mandato.
La decisión de no publicar su testamento político ha generado diversas reacciones entre analistas y ciudadanos. Algunos consideran que es una oportunidad perdida para conocer más sobre sus verdaderas intenciones y reflexiones al final de su gobierno. Otros apoyan la decisión familiar como un acto respetuoso hacia su intimidad.