La ONU cifró hoy en 29 los palestinos muertos y en más de doscientos los heridos en dos días de ataques con cohetes y bombardeos entre milicianos de Gaza y el Ejército israelí.
El coordinador humanitario de la ONU para los territorios palestinos ocupados, Jamie McGoldrick, lo confirmó así a la prensa, tras hacer una presentación de las necesidades más urgentes de la población palestina ante varias misiones diplomáticas en la sede europea de Naciones Unidas en Ginebra. Hasta el momento la cifra oficial de víctimas mortales del lado palestino, como consecuencia de la escalada de violencia del fin de semana, era de veinticinco.
McGoldrick confirmó que en Israel hubo cuatro fallecidos y cerca de dos centenares de heridos. Una posible interrupción del suministro alimentario y la situación crítica de los hospitales concentran la preocupación de la ONU con respecto a Gaza. Desde el inicio de las llamadas "Marchas de retorno", que se repiten cada viernes desde hace trece meses en Gaza, 29.000 palestinos han sido heridos y de éstos 7.000 han sido blanco de disparos israelíes.
De esas víctimas, los hospitales se encuentran actualmente ante la imposibilidad de tratar -por falta de suministros, de equipos y de cirujanos- a 1.700 casos de heridos que requieren cirugías complejas para volver a caminar, precisó McGoldrick. Hasta el momento, 120 de esos heridos -incluyendo veinte niños- han sufrido la amputación de una extremidad.
La ONU ha pedido a los países donantes 20 millones de dólares para devolver a los hospitales una capacidad de atención mínima, pero la financiación escasea este año en particular. De los 350 millones de dólares solicitados a principios de año por la organización internacional para financiar sus actividades en Gaza y Cisjordania, sólo ha recibido el 14 %.
El coordinador humanitario indicó que también la situación financiera del Programa Mundial de Alimentos y de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNWRA) -que juntos aportan los alimentos que consumen un millón de palestinos en Gaza- es alarmante. Ambos organismos de ayuda necesitan 40 millones de dólares en donaciones aquí a inicios de junio para poder dar las órdenes de compra de alimentos para la segunda mitad del año en Gaza.
"Si esto se interrumpe, no hay alternativa porque la gente no tiene dinero. El 54 % de la población de Gaza no tiene trabajo y esta proporción sube al 70 % en el caso de los menores de 30 años. Además, cada hogar tiene una deuda media de 400 dólares", comentó McGoldrick. En medio de esta situación, Israel está poniendo trabas a la transferencia de remesas a Gaza y niega gran parte de los permisos que necesitan los palestinos heridos para recibir atención médica fuera de ese territorio. EFE