Cincuenta migrantes guatemaltecos, entre ellos
menores de edad, fueron abandonados a su suerte en la Ciudad de San Cristóbal
de las Casas por presuntos polleros. Luego de viajar en condiciones de
hacinamiento al interior de un camión de carga por varias horas, el oxígeno al
interior de la unidad comenzó a falta y los migrantes exigieron a los
conductores les abrieran la puerta, ya que los menores comenzaban a presentar
síntomas de asfixia, los presuntos traficantes accedieron, pero los
abandonaron, huyendo estos con rumbo desconocido.
Las autoridades municipales se percataron de la
presencia de los extranjeros y fueron puestos a disposición del Instituto
Nacional de Migración para proceder con forme a la ley.