El domingo 22 de enero de 2024 quedará marcado para siempre en la memoria de cuatro familias regiomontanas.
Tragedia que cambió vidas
Un domingo de futbol que prometía emociones y alegrías se convirtió en una pesadilla para los aficionados de Rayados del Monterrey que asistieron al partido en Torreón. La puerta 7 del Territorio Santos Modelo fue testigo de una tragedia que dejó a varias personas con lesiones graves y alteró la vida de sus familias de manera irreversible.
Ana Laura Sierra Camarillo, de 23 años, viajó emocionada a Torreón para presenciar el juego de su equipo. Su madre, Lorena Camarillo, le advirtió sobre la violencia entre los aficionados de Santos y Monterrey en la ciudad, pero nunca imaginaron que ese domingo cambiaría sus vidas para siempre.
Lorena, consternada por la situación, expresó: "Esa persona dio vuelta en contra, se regresó, accidente vial no lo es, cambió la vida de demasiadas personas". Ana Laura se encuentra ahora en terapia intensiva con traumatismo craneoencefálico, poli contundida y lesiones severas en la quinta cervical.
Justicia para las Víctimas: Llamado tras el caos en Torreón
El caos desatado en la puerta 7 del Territorio Santos Modelo ha generado un llamado urgente a la justicia por parte de familiares de los afectados. Jonathan Gómez, cuñado de Aglaé García Álvarez, quien sufrió fracturas expuestas, costillas rotas y la amputación de un brazo, exige que se haga responsable a quien corresponda.
"Espero que el gobernador de Torreón nos apoye con este caso. Queremos que se haga justicia por todos, en nombre de mi cuñada y que caiga el peso sobre quien tenga que caer", declaró Gómez. La esposa de otro lesionado, José Rivera, Miriam De León, indignada, se pregunta quién cubrirá los gastos médicos y las terapias, ya que su esposo no podrá trabajar.
Silencio en el TSM: Santos Laguna evita responsabilidades
Mientras las familias afectadas viven días tormentosos, la respuesta de Santos Laguna ha sido limitada. El club solo emitió dos tuits a través de sus presidentes, Alejandro Irarragorri (Orlegi) y Dante Elizalde (Santos Laguna), sin asumir la responsabilidad de los gastos médicos. Representantes del municipio han realizado visitas, pero aún no han ofrecido apoyos concretos a las víctimas.
La madre de Ana Laura, Lorena Camarillo, lamentó: "Le decíamos que no viniera, porque aquí siempre pasa lo mismo, siempre golpean a las personas de Monterrey y eso fue lo que yo le dije. Pasó lo peor". Lo que parecía un viaje para disfrutar de un partido de futbol ahora se ha convertido en un recordatorio trágico de la violencia en el deporte.