Alice Walton, la única hija del fundador de Walmart, Sam Walton, ha alcanzado un hito importante al convertirse en la mujer más rica del mundo.
Esta distinción llega en un momento en que las acciones de Walmart han alcanzado un máximo histórico, impulsando la fortuna de Walton a 89.100 millones de dólares. Con esta cifra, supera a Françoise Bettencourt Meyers, heredera de L'Oréal, quien ahora posee un patrimonio estimado de 88.400 millones de dólares.
Walton, de 74 años, ocupa actualmente el puesto 18 en la lista de las personas más ricas del mundo, solo un lugar detrás de su hermano Rob Walton. Las acciones de Walmart han subido un 47% en lo que va del año, mientras que las de L'Oréal han caído un 13%. Esta diferencia en el rendimiento de las acciones ha contribuido a la posición destacada de Walton en el ranking global.
A pesar de haber vendido más de 22.000 millones de dólares en acciones de Walmart en la última década, los herederos de Sam Walton aún mantienen una participación significativa en la empresa, que ronda el 46%. La familia ha logrado mantener su influencia en Walmart gracias a las recompras de acciones que han evitado la dilución de su participación.
Además de su éxito financiero, Walton ha centrado sus esfuerzos en la filantropía. Fundó el Museo de Arte Americano Crystal Bridges en Bentonville, Arkansas, y ha invertido más de 5.7 mil millones de dólares en cinco fundaciones benéficas familiares. Su Art Bridges Foundation, por ejemplo, ha gastado más de 377 millones de dólares en la adquisición y préstamo de obras de arte estadounidense a más de 230 museos en todo el país desde su fundación en 2016.
Alice Walton también ha creado la Escuela de Medicina Alice L. Walton, que abrirá sus puertas en 2025 en Bentonville. En un comunicado, Walton expresó su intención de enfocarse en sus nuevas organizaciones dedicadas a las artes y la salud, después de haber presidido el Museo Crystal Bridges y otros proyectos filantrópicos.