El proceso de votación en Estados Unidos es un sistema complejo y multifacético que se distingue por su estructura federal y el uso del Colegio Electoral
A diferencia de otros países donde el voto popular determina directamente al ganador, en EE.UU. los ciudadanos votan para elegir a electores que, a su vez, seleccionan al presidente y vicepresidente. Este sistema se basa en la Constitución y ha sido objeto de debate y crítica a lo largo de los años debido a sus implicaciones democráticas.
Las elecciones presidenciales se celebran cada cuatro años, siendo el primer martes de noviembre el día designado para la votación. Sin embargo, el proceso electoral comienza mucho antes. Los candidatos deben registrarse ante la Comisión Federal Electoral (FEC) y participar en primarias y caucus para ganar el apoyo de su partido. Estos eventos se llevan a cabo entre enero y junio del año electoral, donde los votantes expresan sus preferencias y se asignan delegados a los candidatos según los resultados obtenidos.
Una vez que los candidatos han sido seleccionados por sus respectivos partidos durante las convenciones nacionales, la campaña electoral se intensifica
Los debates presidenciales suelen tener lugar entre septiembre y octubre, permitiendo a los votantes conocer las posturas de los candidatos sobre temas clave. La votación anticipada también juega un papel importante, ya que muchos estados permiten a los ciudadanos votar antes del día oficial de elecciones, facilitando así la participación.
El sistema del Colegio Electoral es fundamental para entender cómo se determina el ganador de la presidencia. Cada estado tiene un número específico de electores, que corresponde al total de sus senadores y representantes en el Congreso. En total, hay 538 electores, y un candidato necesita obtener al menos 270 votos electorales para ganar. La mayoría de los estados aplican el principio "el ganador se lleva todo", lo que significa que el candidato que obtiene la mayoría de votos en un estado recibe todos los votos electorales de ese estado.
A pesar de este sistema, ha habido ocasiones en las que un candidato ha ganado la presidencia sin obtener la mayoría del voto popular nacional. Esto ha ocurrido en dos ocasiones recientes: en las elecciones de 2000 entre Al Gore y George W. Bush, así como en 2016 entre Hillary Clinton y Donald Trump
En cuanto a la elegibilidad para votar, todos los ciudadanos estadounidenses mayores de 18 años tienen derecho al sufragio, aunque existen restricciones en algunos estados para aquellos con condenas penales. El registro para votar varía según el estado; algunos permiten el registro el mismo día de las elecciones, mientras que otros requieren que los votantes se registren con anticipación.
La tecnología también ha influido en el proceso electoral estadounidense. La mayoría de los votantes utilizan máquinas de votación electrónicas o boletas impresas para ejercer su derecho al voto. Sin embargo, la seguridad electoral sigue siendo una preocupación constante, especialmente con respecto a posibles interferencias externas o fraudes.
Las elecciones presidenciales de 2024 se celebrarán el martes 5 de noviembre de 2024, y serán las sexagésimas elecciones presidenciales en Estados Unidos