El mundo lucha por encontrar una cura contra la enfermedad provocada por Covid-19, el virus ha matado en el mundo a 776 mil 241 personas y ha infectado a más de 21 millones.
En China registraron la patente de su primera vacuna contra el coronavirus, la cual es desarrollada por la biofarmacéutica CanSino Biologics y el Instituto de Biotecnología de Pekín. El equipo de trabajo es dirigido por la epidemióloga y general del ejército chino Chen Wei.
Es llamada Ad5-nCOV, emplea un virus debilitado del resfriado común, un adenovirus tipo 5, que es modificado para expresar la proteína S de la membrana del coronavirus y generar una respuesta inmune en el organismo. Los resultados de la segunda fase de los ensayos clínicos, presentados a finales de julio en la revista The Lancet , demostraron que la vacuna era segura e inducía respuesta inmune contra el coronavirus. Para su desarrollo se hicieron pruebas en 508 voluntarios como continuación de la fase I, los resultados, fueron positivos.
Los responsables aseguran que la candidata "puede ser producida en masa en un corto periodo de tiempo" y que es "rápida y fácil de preparar". La patente engloba 14 solicitudes de derecho de propiedad intelectual para CanSino, incluida la secuencia de nucleótidos de la vacuna, el propósito de la aplicación, las formas de preparación y los métodos.
La seguridad y efectividad de la vacuna deberá confirmarse en la fase III del ensayo clínico, que acaba ser lanzado en Rusia de la mano de la compañía Petrovax y que también tendrá lugar en Arabia Saudí. CanSino se encuentra a su vez en negociaciones con otros países como Brasil o Chile.
Las acciones de CanSino en Hong Kong subieron alrededor del 14% en la sesión matutina del lunes. Las de Shanghái lo hicieron un 6.6%.
Esta es la segunda vacuna registrada contra la Covid-19 después de que Rusia anunciara la suya, bautizada como Sputnik V. En ambos casos, la noticia se ha dado sin haber esperado a los resultados de la fase III del ensayo clínico, si bien Rusia tampoco ha dado a conocer los resultados de las fases anteriores. Al igual que la candidata rusa, a la cual la élite del país habría tenido acceso desde abril, Ad5-nCOV también había estado aplicándose con anterioridad desde que el gobierno de China autorizara su uso a finales de junio entre los militares.
Otras dos empresas del país asiático tienen vacunas en avanzados estados de desarrollo. La farmacéutica Sinovac Biotech trabaja en la llamada CoronaVac, cuya última fase del ensayo clínico se está llevando a cabo en Brasil, Bangladesh e Indonesia. Su producción podría iniciarse a principios del año que viene.
Sinopharm también desarrolla dos candidatas a partir de fragmentos de coronavirus inactivados. Tras demostrar seguridad y lograr inducir una respuesta inmune frente al SARs-CoV-2, la farmacéutica trabaja en la fase III del ensayo clínico que tendrá lugar en Emiratos Árabes Unidos y planea contar con 15 mil voluntarios.