El presidente estadounidense, Donald Trump, citó este viernes una supuesta "invasión" a EE.UU. con "drogas y tráfico de personas" para justificar su recurso a una declaración de "emergencia nacional" para reunir unos 8.000 millones de dólares para financiar la construcción de un muro en la frontera con México.
"Hoy voy a firmar una emergencia nacional (para conseguir fondos para el muro) (...) porque estamos hablando de una invasión de nuestro país con drogas, con tráfico de personas", dijo Trump en una conferencia de prensa en la Casa Blanca. "Tenemos la oportunidad de acercarnos a 8.000 millones de dólares, y con eso vamos a construir mucho muro", prometió.
Trump precisó que rubricaría ese decreto en cuanto terminara la rueda de prensa, y aseguró que prevé que la oposición demócrata le "demande" ante los tribunales para bloquear la medida, aunque pronosticó que ganará la batalla judicial. "Anticipo que me demandarán, aunque no deberían demandarme", afirmó el mandatario, y agregó que el litigio acabará seguramente en el Tribunal Supremo, como ocurrió con la pugna judicial sobre su veto migratorio contra los ciudadanos de varios países de mayoría musulmana.
"Lo que pasará, tristemente, es que nos demandarán, tristemente habrá un proceso (judicial), y felizmente, ganaremos", subrayó. La declaración de emergencia nacional permite a los presidentes acceder a una prerrogativa temporal y especial para hacer frente a una crisis, y la oposición demócrata considera que Trump está abusando de su poder al recurrir a ello para reunir fondos, dado que el Congreso tiene la potestad exclusiva en materia presupuestaria. Según la Casa Blanca, el recurso de Trump a esa medida ejecutiva le permitiría desviar 6.600 millones de dólares en otras partidas presupuestarias de los Departamentos del Tesoro y de Defensa para dedicarlos a la construcción de una barrera fronteriza.
Junto a los 1.375 millones aprobados por el Congreso, la Casa Blanca conseguiría así casi 8.000 millones de dólares, con los que busca erigir unos 376 nuevos kilómetros (234 millas) de una barrera fronteriza que estaría formada por postes de acero, y no sería, por tanto, un muro de hormigón. Trump aprovechó además su discurso para "agradecer al presidente" de México, Andrés Manuel López Obrador, por su "ayuda con las monstruosas caravanas (de inmigrantes indocumentados) que han ido viniendo" hacia Estados Unidos desde Centroamérica, atravesando territorio mexicano.
El mandatario también reiteró que le gustaría firmar "una reforma migratoria sustancial", pero solo hizo referencia a sus prioridades -como la de acabar con el proceso por el que los residentes permanentes en EE.UU. pueden ayudar a sus familiares a emigrar al país- y no a una posible regularización de los indocumentados. EFE