Tras el asesinato del presidente de Haití, Jovenel Moise, el primer ministro interino, Claude Joseph, declaró el estado de sitio por 15 días en el país
Joseph dijo que habrá justicia y mencionó que podrán asesinar al presidente pero no matarán sus ideas.
El funcionario estuvo rodeado del director de la Policía Nacional, Leon Charles, y otras autoridades, después de presidir un Consejo de Ministros extraordinario, en el que aseguró "se han tomado todas las medidas para asegurar la continuidad del Estado".
Hasta el momento no hay personas detenidas por el crimen. Las autoridades aseguran que el crimen fue cometido por personas muy bien entrenadas.
Esto podría agravar la inestabilidad política que de hecho, se vive desde hace años.