Un juez de la Corte del Distrito Este de Nueva York, ordenó confiscar cinco propiedades del narcotraficante mexicano Rafael Caro Quintero que fueron obtenidas con ganancias del narcotráfico y se ubican "en y alrededor de" la ciudad mexicana de Guadalajara, en Jalisco.
"La orden de hoy es otro paso adelante en nuestra incansable búsqueda de justicia para las víctimas de la brutal organización de narcotráfico de RCQ y especialmente para el agente especial de la DEA Camarena, quien fue trágicamente asesinado a manos del sindicato criminal de RCQ", destaca el comunicado del Departamento estadounidense de Justicia.
Las propiedades son las siguientes, de acuerdo con el documento judicial:
El documento judicial señala que las investigaciones revelaron que estas propiedades fueron adquiridas con recursos del narcotráfico y que Caro Quintero las habría puesto a nombre de sus familiares para intentar ocultar que él era el dueño y que había utilizado ganancias ilegales para comprarlas y evitar, así, que las autoridades mexicanas las confiscaran.
Las autoridades informaron que dichas propiedades "fueron adquiridas por Rafael Caro Quintero con ganancias generadas por su organización de tráfico de drogas, una facción del Cártel de Sinaloa".
Estados Unidos buscara lograr la implementación de la orden de confiscación "a través de canales diplomáticos".
"Esta orden es otro avance en nuestra búsqueda incansable de justicia para las víctimas de la brutal organización de tráfico de drogas de Caro Quintero y especialmente para el agente especial de la DEA, Enrique Kiki Camarena, quien fue trágicamente asesinado a las manos de la organización criminal de Caro Quintero", señaló el fiscal en funciones para el Distrito Este de Nueva York, Mark J. Lesko, quien agregó que al confiscar estas propiedades, "nos unimos con el gobierno mexicano y nuestros socios en la impartición de justicia de la DEA para conmemorar la vida del agente especial Camarena y recordar su sacrificio último".
Por su parte, Ray Donovan, agente especial de la división de Nueva York de la DEA dijo que Caro Quintero "es uno de los criminales más buscados del mundo por años de tráfico de drogas y por su papel en el asesinato de uno de los nuestros [Camarena]".
Caro Quintero, quien permanece fugitivo, está en la lista de los 10 criminales más buscados del Buró Federal de Investigaciones (FBI). El Departamento estadounidense del Estado ofrece una recompensa de 20 millones de dólares por información que conduzca a ayude a su captura.
Rafael Caro Quintero es uno de los tres líderes del cártel de Guadalajara, la primer organización del narcotráfico en México, junto con Ernesto Fonseca "Don Neto" y Miguel Ángel Félix Gallardo.
Caro Quintero fue arrestado en San José, Costa Rica, el 4 de abril de 1985, acusado del asesinato del integrante de la DEA Enrique "Kiki" Camarena y por otros delitos. Por ello, ingresó a la lista de los 10 más buscados por el gobierno de Estados Unidos.
En abril de 2018, el Buró Federal de Investigaciones de los Estados Unidos (FBI) incrementó la recompensa a 20 millones de dólares a quien proporcione datos que lleven a su captura, ya que en agosto de 2013 obtuvo su libertad, debido a fallas al debido proceso, dictándole libertad anticipada luego de 28 años de reclusión.
Mientras el narcotraficante Rafael Caro Quintero pagaba una condena de 40 años de prisión, sus familiares y amigos crearon una red empresarial legalmente constituida de al menos 30 compañías.
Todos los negocios, abiertos en la ciudad de Guadalajara, Jalisco, fueron dedicados a los sectores inmobiliario, de distribución de combustible, explotación minera, concesionaria de autos nuevos y usados, servicio en casetas telefónicas, restaurantes, moda y calzado, hasta productos de belleza y spa.
Los negocios fueron creados con la participación de 25 miembros de confianza del otrora líder del extinto Cártel de Guadalajara, hoy prófugo de la justicia, y su círculo más íntimo, entre ellos 15 socios y 10 integrantes de su familia, de los que destacan una esposa, cuatro hijos, un yerno, una nuera y sus consuegros, además de una pareja.
Extraoficialmente, se sabe que el capo llegó a acumular una fortuna de casi 500 millones de dólares.
El nombre Rafael Caro Quintero es marca registrada, hecho que impide que esta denominación sea usada sin su consentimiento para servicios de entretenimiento.
También se le debe pedir autorización para material fotográfico, artículos de papelería, así como material para artistas, de dibujo, instrucción, didáctico para publicaciones impresas a menos que se paguen los derechos.
El nombre de pila y ambos apellidos cuentan con dos registros en el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI), aunque el capo no es el beneficiario titular, sino su pareja sentimental y madre de su quinto hijo, Diana Altagracia Espinoza Aguilar, exreina de belleza, quien es la dueña de la exclusividad para lucrar con el nombre y que fue recluida en el penal Puente Grande, por delincuencia organizada.