La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, anunció este miércoles que su administración revisará la realización de las corridas de toros en el país, afirmando su compromiso como "protectora de los animales". Durante su conferencia matutina, Sheinbaum destacó la necesidad de evaluar esta práctica, que ha sido defendida por algunos como parte de la tradición cultural en varias comunidades.
La mandataria mencionó que, aunque las corridas de toros han existido durante muchos años, es crucial considerar la opinión de la sociedad y de las organizaciones que promueven el bienestar animal. "Estamos también en un momento de revisar todo ello", expresó Sheinbaum, quien asumió el cargo el 1 de octubre de este año.
Ante preguntas sobre su postura en relación con las peleas de gallos y las corridas de toros, la presidenta enfatizó que se está por aprobar la reforma constitucional presentada por el expresidente Andrés Manuel López Obrador en febrero, la cual busca prohibir el maltrato animal en la Constitución. "Yo soy protectora de los animales, seres sintientes", afirmó Sheinbaum.
En otros países, como Colombia, las corridas de toros han sido prohibidas, mientras que en algunos lugares se realizan sin la muerte del animal. Sheinbaum subrayó la importancia de dialogar con la ciudadanía, las organizaciones protectoras de animales y quienes están involucrados en estas prácticas para encontrar soluciones adecuadas. "Es tiempo de proteger a los animales y de revisar estas prácticas", reiteró.
Las corridas de toros han generado un debate intenso en México, donde han enfrentado prohibiciones temporales. Desde junio de 2022 hasta diciembre de 2023, la Plaza México, el mayor recinto taurino del mundo, estuvo cerrada a estos eventos debido a un fallo de la Suprema Corte. Esta decisión generó protestas y apoyos, reflejando la división de opiniones en la sociedad mexicana.
Los grupos animalistas han estado presionando al Congreso de la Ciudad de México, donde el partido gobernante, Movimiento Regeneración Nacional (Morena), tiene la mayoría, para que se promulgue una ley que prohíba las corridas de toros. Sin embargo, los aficionados argumentan que estas actividades forman parte de la cultura y las tradiciones del país.
Sheinbaum también se mostró abierta a encontrar alternativas para aquellos que dependen económicamente de estas prácticas. "Si hay personas que viven de estas prácticas, buscar una orientación distinta para que la gente no se quede sin empleo", sugirió, enfatizando que la protección de los animales debe ir acompañada de medidas para asegurar el bienestar de las personas involucradas.