El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) ha denunciado una campaña mediática que busca desacreditar sus procesos operativos y la integridad de sus funcionarios
El IMSS señaló que al menos ocho medios de comunicación desde principios de septiembre, se han difundido versiones imprecisas a través de columnas y redes sociales. A pesar de las aclaraciones y explicaciones jurídicas proporcionadas por la institución sobre su Reglamento Interno, los autores de esta campaña continúan propagando información falsa y difamatoria.
El IMSS enfatiza que la Dirección de Operación y Evaluación (DOE), bajo la dirección de Javier Guerrero García, no tiene responsabilidad en la adquisición de medicamentos o en obras públicas. Su función se limita a asegurar una correcta operación y evaluación de las delegaciones del IMSS en todo el país.
La institución señaló que los ataques son producto de la afectación de intereses económicos de ciertos proveedores de medicamentos que los ofrecen a sobreprecio
Como respuesta a esta situación, el titular de la DOE ha solicitado una auditoría al Órgano Interno de Control (OIC) para examinar los recursos manejados por su área desde 2021
Además, el IMSS ha estado colaborando con la Secretaría de Salud y BIRMEX para optimizar la compra de medicamentos, asegurando precios competitivos y proveedores confiables, según lo informado por ellos, así mismo señalaron que este esfuerzo es parte de una estrategia más amplia para mejorar la eficiencia en la adquisición de insumos médicos, lo cual es fundamental para el funcionamiento del sistema de salud pública.
La situación es crítica para aquellos sin acceso a servicios de salud, que representan aproximadamente el 50% de la población mexicana. Estos individuos deben costear sus tratamientos completamente de su bolsillo, lo que agrava su situación financiera
Los precios de los medicamentos han aumentado entre un 200% y 300% desde 2020, afectando tanto a tratamientos para enfermedades crónicas como a medicamentos de uso cotidiano. Este incremento ha sido particularmente severo en fármacos esenciales como antibióticos y tratamientos para la diabetes y el cáncer, lo que ha llevado a muchas personas a optar por alternativas más económicas, aunque de menor calidad.
El aumento de precios no solo se debe a la inflación generalizada, que ha alcanzado niveles históricos del 7.7%, sino también a factores externos como la escasez de materias primas y alteraciones en las cadenas de suministro globales. Medicamentos como la metformina, utilizada para controlar la diabetes, han visto incrementos que han llevado a pacientes a elegir versiones genéricas, que aunque más accesibles, no siempre garantizan la misma eficacia.
Con más de 35 millones de personas sin acceso a servicios médicos formales, muchas familias enfrentan decisiones difíciles entre comprar alimentos o medicinas