Uno de los más grandes científicos de todos los tiempos, Stephen Hawking, responde a preguntas sobre el universo, la existencia de Dios, la colonización espacial, la inteligencia artificial y hasta el Brexit en su último libro.
Hawking trabajó en el libro "Brief Answers to the Big Questions" (Respuestas breves a las grandes preguntas) antes de su muerte el 14 de marzo de este año y con ello regala a la humanidad su último legado científico y social.
Catedrático Universidad de Cambridge, quien estuvo postrado a una silla de ruedas durante 50 años debido a una enfermedad neuromotora, también dejó un mensaje póstumo a las nuevas generaciones a través de un video grabado con su sintetizador de voz.
"Recuerda mirar las estrellas y no ver hacia tus pies. Trata de entender lo que ves y pregúntate por qué existe el universo. Sé curioso".
En una emotiva presentación en el Museo de Ciencias a la que asistieron sus hijos Timothy y Lucy, fue proyectado el video en el que también hace un llamado a los líderes mundiales a no recortar el presupuesto a las ciencias.
Hawking no sólo dedicó su vida al estudio de los agujeros negros, sino también exploró el futuro de la inteligencia artificial, la colonización de otros planetas y el futuro de la Tierra.
También levantó su voz para criticar el Brexit (la salida del Reino Unido de la Unión Europea) y al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, al que en su momento calificó de "demagogo".
En su póstumo libro que fue lanzado a siete meses de su muerte, Hawking reflexiona sobre preguntas fundamentales que han intrigado a la humanidad y responde con la precisión que siempre lo caracterizó.
"Es hora de explorar otros sistemas solares. Expandirnos es tal vez lo único que nos salvará de nosotros mismos. Estoy convencido de que los humanos tiene que dejar la Tierra. Si nos quedamos arriesgamos ser aniquilados", señaló en la página 151.
Sobre el futuro de la inteligencia artificial, Hawking no duda en mencionar que las computadoras van a sustituir a los humanos en los próximos cien años.
El compendio de temas diversos responde también al cuestionamiento de la existencia de Dios con una respuesta definitiva: "Dios no existe", ni tampoco la vida después de la muerte.
"La explicación más simple es que Dios no existe. Nadie creó el universo y nadie dirige nuestro destino", aseveró.
"Creo que creer en la vida después de la muerte es solo un deseo... cuando morimos nos convertimos en polvo", aseguró Hawking, quien fuera uno de los científicos más influyentes de la época moderna.
En su libro advierte también que el futuro de la Tierra "está en riesgo en tantas áreas que me cuesta trabajo ser positivo".
En su mensaje final -tanto en el libro como en el último video que dejó- no pierde las esperanzas en encontrar a la siguiente Einstein (ya que se refiere a ella como una mujer) y pide a las nuevas generaciones "dar rienda suelta a la imaginación".
"Moldea el futuro", fueron sus últimas palabras.
Su hija Lucy Hawking afirmó que fue muy emotivo escuchar la voz de su papá a través del sintetizador de voz.
"Tuve que voltearme porque tenía lágrimas saliendo de mis ojos", declaró a la prensa nacional y extranjera.
En cuanto al legado de su padre, aseguró que fue muy activo en todas las esferas "porque tenía puntos de vista muy fuertes y no tenía miedo de expresarse".
"Creo que se ganó su derecho de expresarse por su carrera científica tan larga, así como su posición como una persona profundamente discapacitada que dependía de la tecnología", anotó su hija.
El libro quedó inconcluso antes de morir y fue terminado después de su fallecimiento.
"Esta fue su idea para dar respuestas definitivas a las preguntas que regularmente nos hacemos, pero como dije no pudo terminar el libro, así que estamos muy agradecidos con sus amigos, colegas y con su equipo que nos ayudó a acabarlo", indicó Lucy Hawking.
Al lanzamiento del libro acudieron sus amigos y colaboradores cercanos, el profesor Malcolm Perry de la Universidad de Cambridge y el profesor Andrew Strominger de la Universidad de Harvard, quienes compartieron algunas experiencias trabajando al lado del incansable investigador de los agujeros negros.
Entre otras cosas, Hawking tenía la habilidad de hacer conceptos abstractos accesibles para todos, como lo comprueba su más reciente animación sobre los agujeros negros y el descubrimiento de "pelos suaves".
Hawking, autor del bestseller "Breve historia del tiempo" que ha vendido más de 13 millones de copias, falleció en su casa ubicada en la ciudad universitaria de Cambridge a la edad de 76 años.
Sus restos fueron depositados en la Abadía de Westminster entre las tumbas de los científicos Isaac Newton y Charles Darwin.