Detener el flujo migratorio ilegal, así como el reclamo de México para que pare el tráfico de armas a nuestro territorio, y la postura del presidente López Obrador, respecto al bloqueo económico en Cuba y la solicitud de desaparición de la Organización de Estados Americanos (OEA), son algunas de las claves de la relación bilateral de México y Estados Unidos, actualmente.
En el primer aspecto, ambas naciones están buscando estrategias para que los centroamericanos se queden en su país. Y para ello, la vicepresidenta Kamala Harris prometió en junio pasado 250 millones de dólares en inversiones para la región.
"Del lado del presidente mexicano, básicamente la propuesta es en el sentido de ¨no puedo parar la migración si tú no me ayudas en la parte de desarrollo económico", explicó Patricia Armendáriz, directora de Financiera Sustentable.
De acuerdo con Vanessa Cárdenas, analista internacional de la Universidad Anáhuac, previo al que será el segundo encuentro entre los presidentes Joseph Biden y Andrés Manuel López Obrador, la relación en materia de seguridad "no llega bien", pues Washington está molesto ante las reformas que regulan la operación de las agencias estadounidenses en territorio mexicano.
"Traen a México al general Salvador Cienfuegos, y no sólo lo liberan, sino que López Obrador hace declaraciones en las que limita las operaciones de las agencias norteamericanas en México. Van en contra de esta relación en términos de seguridad que tenemos con los Estados Unidos, que definitivamente no confían en su par de México. Por otro lado se han quejado mucho de la falta de información por el contubernio de las autoridades mexicanas en términos del narcotráfico".
En este tema también entra la demanda de nuestro país, de pedir que se esclarezcan los trabajos de las empresas de armas, que terminan en territorio mexicano.
"México pone ahí el acento. Está buscando una restitución básicamente económica, y está poniendo los ojos en lo que requiere de Estados Unidos para cooperar en esta relación, y esto no está siendo suficiente", advirtió Cárdenas.
La postura del presidente López Obrador, respecto a que desaparezca la Organización de Estados Americanos (OEA), y que sea creado un nuevo organismo "no lacayo", así como su petición por el levantamiento del bloqueo económico en Cuba, también es un punto fundamental.
Ante ello, dijo, el gobierno de Biden actúa con diplomacia: "pragmáticamente actúa a través de la presión económica, y obviamente también con el ámbito de la seguridad".
Consideró que el gobierno estadounidense podría tomar represalias a través del Tratado Comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC):
"El desconocimiento de varios de los puntos en el tratado, podría ser una de las formas en que Estados Unidos enfrente esta falta de cooperación en materia de seguridad y de cumplimiento en materia laboral y comercial de nuestros acuerdos".
