La Línea 12 del Metro quedó marcada por la avaricia política, la falta de previsión, el descuido... y la tragedia.
26 personas murieron aquella noche, entre ellas un niño y más de cien resultaron lesionados. Las familias de las víctimas claman justicia, pero hasta el momento no se ha castigado a ningún responsable.
La Jefa de Gobierno de la Ciudad de México solicitó un peritaje a fondo sobre el siniestro para saber ¿Qué fue lo que pasó? dijo que se llagará hasta las últimas consecuencias.
La sociedad sigue en espera de una explicación satisfactoria de lo que causó el accidente en el tramo elevado de la línea dorada del metro capitalino, el pasado 3 de mayo.
Conforme transcurre el tiempo, el caso se enreda cada vez más. Los dictámenes de la firma DNV, hacen evidente que existen fallas en la construcción.
La conclusión final del peritaje: pernos mal soldados, sin embargo, la reducción al presupuesto asignado al sistema de transporte colectivo, en 2019 y 2020 dio forma a la teoría de falta de mantenimiento como posible causa administrativa.
Al día siguiente del desplome, el ex director del Metro, Jorge Gaviño, declaró que en el último año, no se nombró a ningún subdirector de mantenimiento.
Así lo confirmó la entonces directora del sistema de transporte colectivo, Florencia Serranía, en una sesión del congreso capitalino, en enero pasado. Simplemente dijo que no había responsable porque ella se encargaba de esa posición.
Hoy, Serranía es la única funcionaria separada de su cargo por la tragedia de mayo pasado.
¿Y qué hay de los recursos?
La organización mexicanos contra la corrupción y la impunidad, documentó que la funcionaria mintió, ya que los datos no coinciden con los documentos oficiales del propio gobierno de la ciudad.
En su trabajo revela que ese mismo día, se publicó en la cuenta pública, la fuente de información más confiable en términos presupuestales, en él se refleja un monto no ejercido por mil 360 millones de pesos.
Mexicanos contra la corrupción y la impunidad, demuestra que en 2019 y 2020, el Metro de la capital ha sufrido recortes en su presupuesto aprobado.
Pero el gobierno de la Ciudad de México explicó que la modificación de su gasto se debió una reducción del 40 por ciento de viajes, como consecuencia de la pandemia.
Aún así, los números ofrecidos entonces, difieren de los asentados en la cuenta pública que el mismo gobierno entregó al congreso local, y donde reconoce un subejercicio de al menos 587 millones de pesos.
Detrás del desplome en el viaducto elevado de la línea 12 se documentan mentiras evidentes, convertidas en verdades ocultas.