El mexicano Jesús Rodríguez Jiménez, fue sentenciado a 30 años de prisión por la corte del distrito sur de Nueva York, es acusado de lavar más de 250 millones de dólares para organizaciones centroamericanas del narcotráfico.
Rodríguez, de 47 años y originario de Monterrey, Nuevo León, dirigía un negocio internacional de lavado de dinero con vínculos en México, Italia, Hungría, Panamá y China, lo que facilitó el movimiento de cientos de millones de dólares en ganancias a nombre de cárteles de la droga en México y América Central, según la corte.
A través de una red de compañías fantasma, cuentas bancarias pantalla y envíos de dinero en Estados Unidos y Europa, Rodríguez lavó con éxito más de 250 millones de dólares, lo que facilitó el tráfico de cantidades masivas de narcóticos en todo el mundo.
La fiscalía destacó que los clientes de Rodríguez han estado involucrados en el tráfico de cientos de kilogramos de cocaína y heroína, entre otras drogas. Hasta la fecha, la investigación ha permitido presentar cargos contra ocho acusados.
A través de una red de compañías fantasma, mensajeros y su propia empresa de automóviles blindados, Rodríguez logró enviar a México millones de dólares provenientes de las calles de Nueva York, Chicago, Detroit, Filadelfia y otras ciudades de Estados Unidos.
Al introducir estas grandes cantidades de dinero en el sistema bancario, Rodríguez también podía transferir recursos a compañías en China, Hong Kong y Taiwán, que enviaban mercancías a varios países productores de drogas.