Personal operativo del ISSSTE protestó afuera de la delegación estatal ubicada en Toluca para exigir la reinstalación de sus 300 compañeros que fueron despedidos recientemente sin que hayan recibido una liquidación justa por sus años de servicio.
Los manifestantes pidieron al gobierno federal dejarlos conservar su trabajo, pues señalan que existe la incertidumbre de que continuarán los despidos y eso afectará a por lo menos a 350 empleados, de acuerdo a José Javier Agüero Taboada, secretario General Sindicato Independiente de Trabajadores del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores.