Nueve robots humanoides sociales tendrán interacción con los periodistas en una rueda de prensa que organizará en julio próximo la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) durante su cumbre anual sobre el uso de la inteligencia artificial con fines loables.
Según el organismo, que funciona como un brazo de Naciones Unidas especializado en tecnologías, un grupo de robots con forma humana y capaces de interactuar con las personas responderán a las preguntas de la prensa en un evento sin precedentes a nivel mundial que se realizará en Ginebra el 6 y 7 de julio.
Además, cerca de cuarenta robots, concebidos para cumplir diversas tareas -como apagar incendios, construir casas o brindar cuidados de salud- estarán presentes con sus creadores y mostrarán sus capacidades a los participantes en la cumbre, que está abierta a todos (previa inscripción) de forma gratuita.
Un portavoz de la OIT precisó que entre los robots que entrarán en relación con los periodistas estarán Beonmi, el primer robot humanoide completamente funcional y de uso general; y Nadine, uno de los humanoides sociales más realistas que existen.
También estarán Sophia, un robot innovador que actúa como embajador para un organismo de Naciones Unidas dedicado a promover el desarrollo; Ai-Da Robot, un robot artista considerado "ultra realista", y Grace, uno de los ejemplares más avanzados en lo relacionado con la atención sanitaria.
Con su cumbre sobre inteligencia artificial, la ITU tiene el objetivo de demostrar que las nuevas tecnologías pueden ayudar a cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, trazados por Naciones Unidas con el horizonte de 2030, en particular en áreas como la lucha contra la crisis climática y la respuesta humanitaria en contextos de crisis. EFE
Un modelo español de inteligencia artificial predice edad y sexo de clientes
Un equipo universitario español ha desarrollado un modelo de inteligencia artificial capaz de predecir la edad y el sexo de un comprador en una tienda en función de sus movimientos oculares y corporales y su postura.
Los investigadores, de la Universidad Politécnica de Valencia (este), han publicado el trabajo en el Journal of Virtual Reality como parte del proyecto europeo de neuroeconomía Rhumbo.
Han desarrollado una tienda virtual de alto realismo, donde las personas participantes, equipadas con dispositivos como cámaras de seguimiento ocular o sensores de movimiento, podían desplazarse libremente explorando el local y realizando compras.
"Con estos dispositivos pudimos registrar en tiempo real cómo miraban los productos, movían las manos y la cabeza, se movían por la tienda... Analizamos, en definitiva, el comportamiento inconsciente de cada cliente y hallamos una serie de patrones comunes en función de su edad y sexo", explica Jaime Guixeres, coordinador del estudio.
Participaron 57 personas y todas realizaron tres tareas en dos situaciones de compra diferentes: en una de ellas se desplazaban libremente por la tienda; y en la otra tenían que buscar unos productos concretos.
"Recopilamos información como el tiempo que permanecían en la tienda, su nivel de interacción con los productos y la cantidad de productos que miraban. Y, posteriormente, utilizamos todos estos datos para desarrollar un modelo basado en inteligencia artificial que nos permitía predecir la edad y el sexo de los participantes", añade Guixeres.
En las conclusiones los investigadores señalan que los hombres miran más áreas del expositor y recorren más espacio a mayor velocidad, mientras que las mujeres se toman más tiempo en cada parada y son más rápidas en detectar las zonas de interés.
En cuanto a la edad, los jóvenes se mueven más rápido por la tienda e interactúan con más productos, mientras que los adultos son más selectivos en la forma de mirar y realizan más paradas por minuto para detectar la información relevante de la tienda.
El estudio constata la capacidad de la realidad virtual para recopilar información sobre las respuestas conductuales de las personas a la hora de comprar y cómo esta información puede ser utilizada para identificar sus características, en este caso, edad y sexo.
"Disponer de este conocimiento ofrece a las marcas la posibilidad de analizar qué áreas de una hipotética tienda virtual podrían personalizarse más en función del perfil demográfico de los compradores, para personalizar los productos, mejorar la experiencia de compra y, en último término, aumentar las ventas", destaca Guixeres. EFE