Con una cuerda o un arma.
Bastan unos minutos para que una persona acabe con su vida.
Un niño o una niña de 10 a 14 años que recurren al suicidio para poner fin a su sufrimiento.
Los niños generalmente lo hacen por sufrir de bullying y las niñas por pasar por cuadros de violencia sexual.
Detectar a un niño que pretende quitarse la vida no es sencillo.
Pero sí hay signos que pueden detectar los padres de familia como cuadros de depresión, llanto constante, aislamiento o bien ya no quiere ir a la escuela.
Aunque no siempre es así pues muchos pequeños esconden su dolor a través de la sonrisa.
En el Estado de México, el último dato registrado en el año 2015 arroja que hubo 666 casos de suicidio, que comparados con los 274 que hubo en el 2001, hablan de que se ha duplicado el número de casos en tan sólo cuatro años.
De los 666 casos registrados en el año 2015, 136 fueron protagonizados por jóvenes de los 15 a 19 años de edad.
Cabe mencionar que el 85 por ciento de los suicidios se da por ahorcamiento, técnicas que los jóvenes adquieren de internet.