El presidente Donald Trump pidió hoy a México detener la caravana de inmigrantes hondureños y señaló que de lo contrario desplegará al ejército estadunidense para cerrar la frontera sur de Estados Unidos.
Trump dijo que los líderes de los países del Triángulo de Norte (Guatemala, El Salvador y Honduras) "están haciendo poco" por detener los flujos de personas, incluidos criminales, que buscan entrar a los Estados Unidos a través de México.
"Debo, en los términos más enérgicos, pedir a México detener este embate ?¡y si no lo pueden hacer, llamaré a los militares de Estados Unidos a CERRAR NUESTRA FRONTERA SUR!", escribió en su cuenta de Twitter.
Trump sostuvo que el "ataque" contra Estados Unidos en la frontera sur, incluyendo elementos criminales y drogas, es más importante para él como presidente que el comercio o el nuevo acuerdo comercial USMCA o T-MEC.
"Ojalá México tenga este embate en su frontera norte", insistió.
Trump, quien ha colocado la migración como tema recurrente en la recta final a las elecciones legislativas del 6 de noviembre, involucró al Partido Demócrata asegurando que son partidarios de "Fronteras Abiertas".
"Todos los demócratas son culpables de leyes débiles", remató.
El mandatario estadunidense había amenazado a El Salvador, Guatemala y Honduras con suspender de manera inmediata la ayuda de Estados Unidos, estimada en más de 2.6 mil millones de dólares desde 2015, si no detenían a la caravana de inmigrantes procedente de Honduras.
Ante la eventual llegada de la caravana de inmigrantes hondureños a México, el gobierno mexicano indicó que quien desee ingresar a territorio nacional y cuente con los documentos de viaje y una visa concedida por el gobierno mexicano, podrá entrar al país y moverse con plena libertad.
México indicó que toda persona que ingrese a territorio nacional y desee pedir el reconocimiento de la condición de refugiado o ser beneficiario de medidas de protección complementaria, deberá hacerlo individualmente, de conformidad con la legislación vigente.
Al respecto, precisó que la legislación nacional vigente establece un periodo de hasta 45 días hábiles, prorrogables por un periodo igual, para resolver sobre las solicitudes, tiempo en el que el solicitante deberá permanecer en una estación migratoria, a cargo del Instituto Nacional de Migración (INM).