El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, insistió hoy en su amenaza de cerrar la frontera sur, y advirtió de que lo podría hacer "la próxima semana" si México no detiene "inmediatamente" toda la inmigración ilegal. "Si México no detiene inmediatamente toda la inmigración ilegal que ingresa a Estados Unidos a través de nuestra frontera sur, estaré cerrando la frontera o grandes secciones de la frontera la próxima semana", dijo Trump en su cuenta de Twitter.
El mandatario, que este jueves ya había amenazado con clausurar el linde al criticar lo que calificó de inacción de México, Honduras, Guatemala y El Salvador para frenar el flujo de inmigrantes, se quejó hoy de que los demócratas le hayan dado a EE.UU. "las leyes de inmigración más débiles del mundo", mientras que calificó de "fuertes" las normas mexicanas.
"Ellos ganan más de 100.000 millones de dólares al año a costa de Estados Unidos. Por lo tanto, el Congreso debe cambiar nuestras leyes migratorias débiles ahora y México debe impedir que los ilegales ingresen a Estados Unidos", reclamó. Trump defendió que el cierre fronterizo "sería una buena cosa" y se quejó de que EE.UU. "pierde mucho dinero", al señalar que a la situación migratoria se añade el tráfico de drogas. El presidente estadounidense ha criticado en numerosas ocasiones a su vecino del sur por lo que, a su juicio, es una falta de acción ante las caravanas de migrantes procedentes de Centroamérica que atraviesan su territorio rumbo a EE.UU.
En diciembre, Trump ya amenazó con cortar la asistencia extranjera que entrega a los países centroamericanos. Este miércoles, el jefe de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos, Kevin McAleenan, avisó de un "punto de quiebre" en la frontera sur ante la falta de recursos para gestionar la llegada creciente de migrantes. Desde El Paso (Texas), uno de los puntos fronterizos calientes, McAleenan reconoció que sus agentes están desbordados y que están dejando libres "a regañadientes" a los inmigrantes detenidos tras realizarles verificaciones superficiales de antecedentes.
Trump ha declarado una emergencia nacional para financiar la construcción de su polémico muro con México ante la negativa del Congreso estadounidense de aportar fondos para ello. Además, se vio obligado a emitir el pasado 15 de marzo el primer veto de su Presidencia para atajar la resolución aprobada por el Congreso, incluido el Senado que cuenta con mayoría republicana, contra su emergencia nacional. El presidente busca alcanzar un total de 8.000 millones de dólares para su anhelado proyecto fronterizo desviando unos 6.600 millones previamente aprobados para el Pentágono y el Departamento del Tesoro.
Tras semanas de negociaciones entre la cartera de Defensa y el Departamento de Seguridad Nacional, responsable de proteger la frontera, el Pentágono anunció el lunes su decisión de desviar 1.000 millones de dólares para erigir 57 millas (unos 92 kilómetros) de nuevo muro fronterizo, construir y mejorar carreteras e instalar luces. EFE