Miles de manifestantes intentaron irrumpir en el Parlamento de Kenia, para protestar contra el aumento de impuestos, la policía intentó dispersarlos con gases lacrimógenos y cañones de agua, pero no pudo pararlos y al ver que seguían avanzando hacia el edificio gubernamental le disparó a varias personas. Se habla de varios muertos y decenas de heridos. Los inconformes exigen la renuncia del presidente William Ruto.
Durante los disturbios, varias partes del edificio fueron incendiadas cuando los legisladores estaban reunidos para aprobar la ley.
Imagen de EFE
Con el Proyecto de Ley de Finanzas de 2024, el Gobierno pretende recaudar 2,700 millones de dólares en impuestos adicionales para reducir el déficit presupuestario y el endeudamiento estatal.
La deuda pública de Kenia asciende al 68 % del producto interior bruto (PIB), cifra superior al 55 % del PIB recomendado por el Banco Mundial (BM) y el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Los manifestantes reclaman que esas medidas fiscales están empujando a la pobreza a la población.
El presidente William Ruto condenó el "ataque sin precedentes" contra la democracia del país
"Hoy Kenia experimentó un ataque sin precedentes a su democracia, el Estado de derecho y la integridad de sus instituciones constitucionales", dijo en un mensaje dirigido a la nación desde la sede de la Presidencia.
El mandatario ordenó "a todos los órganos de seguridad nacional que implementen medidas para frustrar cualquier intento de criminales peligrosos de socavar la seguridad y la estabilidad del país. "Brindaremos una respuesta completa, efectiva y rápida a los traicioneros acontecimientos de hoy".
"Las Fuerzas de Defensa de Kenia se despliegan el 25 de junio de 2024 en apoyo del Servicio de Policía Nacional", informó el ministro keniano de Defensa, Aden Duale, en un breve decreto publicado en The Kenyan Gazette (Boletín Oficial del Estado).