Desde hace un año el circo Kristihany se encuentra varado en la comunidad Matacocuite en el municipio de Veracruz, luego de ser emitida la emergencia sanitaria por el COVID-19, los shows fueron cancelados.
Los primeros meses solventaron los gastos por medio de sus ahorros, pero, con el paso del tiempo, tuvieron que vender vehículos y herramientas de trabajo para poder sobrevivir.
Incluso se dedicaron a la venta de comida, y optaron por crear un taller de herrería para ofrecer sus servicios.
De las más de 30 personas que conformaban el show, entre técnicos, choferes y artistas, quedan menos de 10, solamente la familia, el resto fue despedido.
El equipo de trabajo, se encuentra en malas condiciones, los camiones se han descompuesto por no recibir mantenimiento.
Las autoridades les han prohibido dar funciones hasta que el semáforo epidemiológico lo permita.