A pesar de que a su corta edad la vida no ha sido sencilla para Sara de 10 años, se mantiene mantiene positiva, desde hace seis meses llegó a vivir a la Casa Hogar San Rafael Guízar y Valencia, lugar que se ha convertido en un cobijo pues encontró amor y seguridad.
La casa asistencial brinda apoyó a niñas en situación vulnerable, la mayoría en condición de abandono y maltrato.
Desde hace 12 años la Casa asistencial San Rafael Guízar y Valencia que se ubica en la calle Alacio Pérez de la ciudad de Veracruz, se ha convertido en un hogar para niñas que han enfrentado a situaciones complicadas, aquí no solo reciben techo, alimento y estudios en esta también reciben amor, para construir un mejor futuro.
Aunque reciben ayuda de la sociedad, el apoyo no es suficiente por lo que permanentemente solicitan donaciones de alimentos, artículos de limpieza e higiene personal.
En la Casa Hogar San Rafael Guízar y Valencia cientos de niñas encontraron el cariño y el cobijo que no tuvieron en casa.