Con la ilusión de adquirir un patrimonio, Luis se vio atraído por un inmueble que vendían y promovían en redes sociales. Como parte del proceso dio un anticipo de 80 mil pesos, hoy, intenta recuperar su dinero.
En los últimos años los fraudes inmobiliarios en México incrementaron en 92 por ciento, además, se estima que cada año el sector pierde alrededor de 600 millones de pesos por estafas.
Tipos de fraudes inmobiliarios más comunes
Anuncios Falsos: los estafadores crean anuncios de alquiler o venta atractivos
Ofertas Irresistibles: ofertas que parecen excelentes.
Solicitud de Anticipos: los supuestos vendedores solicitan anticipos
Fraude de Propiedad Falsa: se trata de vender una propiedad que no es de la persona con la que se hace el trato
Fraude de Préstamo Hipotecario: se involucra a alguien que proporciona información falsa a un prestamista
Fraude de Evaluación: se infla el valor de una propiedad para obtener un préstamo hipotecario más grande o venderla a un precio más alto
El presidente de la Asociación mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI), Sergio Lavalle Garcés, detalló que lamentablemente estos delitos van al alza.
"En los últimos años ha ido incrementando, es necesario que se den garantías a los usuarios de que no serán estafados, por eso deben de ir con un agente inmobiliario profesionalizado? imagínate creer que estas adquiriendo un inmueble y termines estafado"
La creciente demanda por contar con una vivienda ha derivado en el aumento de fraudes, basta con que los delincuentes observen una casa abandonada, tomen algunas fotografías y la promuevan en redes sociales para que inicie la estafa.
Algunos de los fraudes inmobiliarios más comunes son a través de anuncios falsos, donde los estafadores promueven una vivienda por concepto de venta o alquiler, otras maneras de operar es mediante ofertas irresistibles, solicitud de anticipos o inflación en el valor de la propiedad.
Antes de cualquier transacción asegúrate de investigar la propiedad y al vendedor, verifica la autenticidad del inmueble, revisa los antecedentes del asesor y confirma la información.
Recuerda si una oferta parece demasiado buena para ser verdad, desconfía, pues las propiedades a precios muy por debajo del mercado generalmente terminan en fraude.