Este viernes, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, firmó una serie de reformas constitucionales que marcan un hito en la lucha por la igualdad de género en el país.
Durante su conferencia matutina, Sheinbaum destacó que estas modificaciones son las primeras que presenta desde que asumió el cargo en octubre, y tienen como objetivo reducir la desigualdad entre hombres y mujeres, así como combatir la violencia de género y la brecha salarial.
"Hoy es un día histórico, hoy se publica este decreto y lo resumiría diciendo: las mujeres ya estamos en la Constitución, nuestros derechos están garantizados en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos", declaró Sheinbaum, refiriéndose a una reforma que cambia radicalmente el enfoque de los derechos de las mujeres en la carta magna.
La reforma incluye modificaciones a seis artículos de la Constitución y siete leyes adicionales, siendo el artículo 4 el principal foco de cambio. Este artículo ahora reflejará el "derecho a la igualdad sustantiva" y el "derecho a una vida libre de violencias". Estos cambios son parte de un reconocimiento formal de la desigualdad histórica que enfrentan las mujeres en México, y abren el camino para crear un entorno más equitativo en todos los ámbitos de la vida pública y privada.
Además, la reforma obliga a las instituciones de seguridad a aplicar una perspectiva de género en su actuación, como se refleja en las modificaciones al artículo 21 de la Constitución. Este cambio también establece que todos los estados deben contar con fiscales especializados en investigar delitos por razón de género, buscando mejorar la respuesta a la violencia y acoso que enfrentan las mujeres.
En cuanto a la brecha salarial, el Instituto Mexicano de Competitividad (IMCO) señala que las mujeres ganan, en promedio, un 14 % menos que los hombres por el mismo trabajo. Además, menos de la mitad de las mujeres en México participan en el mercado laboral, y el 70 % de ellas percibe menos de dos salarios mínimos. Estos datos reflejan una desigualdad estructural que la reforma busca combatir de manera efectiva.
Para lograr estos objetivos, el gobierno de Sheinbaum también modificará leyes clave como la Ley General de Igualdad Sustantiva, la Ley Federal del Trabajo y la Ley de Trabajadores al Servicio del Estado. Paralelamente, las reformas fortalecerán la paridad de género en la administración pública federal, así como en los gabinetes de los estados y municipios, promoviendo una representación más equitativa de las mujeres en todos los niveles de poder.
Esta serie de reformas representa un paso decisivo para México en la lucha por la igualdad de género. Con un enfoque integral que abarca desde la seguridad hasta el ámbito laboral, el gobierno de Sheinbaum pretende asegurar que las mujeres no solo tengan acceso a los mismos derechos, sino que también cuenten con las condiciones necesarias para ejercerlos de manera plena y sin discriminación.