Luego de dos años de no realizarse la fiesta más importante del pueblo jarocho regresó, el Carnaval. Este fin de semana miles de personas abarrotaron el bulevar costero para disfrutar de los paseos de 39 carros alegóricos.
Pese a que aún continuamos en la quinta ola de contagios por COVID19, muy pocas personas portaban el cubrebocas.
La algarabía de los veracruzanos, se vio empañada por el atraso en los 3 desfiles, que a diferencia de otros años, se notaban algunos espacios vacíos entre las gradas. Para esta edición destacó la falta de seguridad, ya que en el arroyo vehicular no se encontraba ningún tipo de elemento resguardando, por lo que las personas irrumpieron en los desfiles.
Más de tres mil personas entre comparsas, batucadas, bastoneras, y tripulaciones de carros alegóricos forman parte del contingente, que ensayaron durante 5 meses para preparar sus coreografías.
Hasta el momento se reporta saldo blanco, las autoridades analizan realizar el carnaval en verano, ya que antes se efectuaba previo al inicio de la cuaresma.