En México, la tuberculosis continúa representando un problema de salud pública agravado por la emergencia de la diabetes y la pandemia de Covid-19.
La Secretaría de Salud informó que tan solo durante 2022 se registraron más de 28.000 mil casos, de los cuales por lo menos el 30 por ciento, desconocía ser portador.
Esta enfermedad es causada por bacterias y por lo general, ataca los pulmones. Sin embargo, también puede afectar otras partes del cuerpo, como los riñones, la columna vertebral y el cerebro, si no se trata adecuadamente incluso puede ser mortal.
La tuberculosis se transmite de una persona a otra por el aire. Las bacterias se liberan cuando una persona con la enfermedad tose, estornuda o habla. Las personas que se encuentran cerca pueden respirar estas bacterias e infectarse.
Aunque algunos de los síntomas son fiebre, tos y flema, aunque no en todos los casos se hacen presentes, por lo que la única manera de detectarlo es a través de un examen físico.
Para prevenir este padecimiento en sus formas graves es necesario lograr cobertura universal en recién nacidos con la vacuna, para evitar el resto de sus formas, se deben cortar las cadenas de transmisión con el diagnóstico y tratamiento, además de evitar las comorbilidades.