México es el país en donde más se cometen crímenes de odio tan solo después de Brasil, de acuerdo al observatorio nacional de crímenes de odio contra las personas LGBTI. Durante 2023, al menos 90 personas fueron asesinadas, por su orientación sexual o identidad de género. De igual manera en el caso de Veracruz, se mantiene a la cabeza como uno de los estados más violentos contra la comunidad, pues el año pasado se cometieron 23 asesinatos de este tipo. Un crimen de odio es un delito cometido contra una persona o grupo de personas motivado por prejuicios basados en características como la raza, religión, origen étnico, identidad de género, discapacidad y por supuesto, orientación sexual. Estos delitos no solo afectan a las víctimas directas, también tienen un impacto en las comunidades a las que pertenecen. Uno de los casos de asesinato más reciente, es el del joven alfredo beauregard, creador de contenido y abogado que hace unos días perdió la vida tras sufrir multiples puñaladas, este hecho ocurrió en la ciudad de vercruz. los crímenes de odio están estrechamente relacionados con la homofobia, que es la aversión o el prejuicio hacia las personas con orientaciones sexuales a individuos del mismo sexo, en actitudes discriminatorias y comentarios despectivos hasta la violencia física y la culminación del odio, los asesinatos. En muchos casos, estos delitos son perpetrados por personas o grupos que tienen actitudes homofóbicas arraigadas. La impunidad, la falta de denuncias por temor a represalias y la discriminación arraigada en algunos sectores de la sociedad son factores que contribuyen a la persistencia de este problema. Ante la prevalencia y el incremento de los casos, colectivos lgbti exigen la creación de una fiscalía especializada en crímenes de odio, además de reforzar la prevención, así como promover la tolerancia y respeto a la diversidad y la igualdad de derechos para todas las personas.