El Baluarte de Santiago, uno de los vestigios históricos más importantes del estado de Veracruz, está a punto de cumplir siete años cerrado al público.
El Polvorín como también se le conoce, es el último baluarte de los nueve que existían, considerados como vigías de la ciudad amurallada de Veracruz durante el siglo XVI.
En el año 2017 se llevó a cabo una rehabilitación integral del inmueble a cargo del Instituto Nacional de Antropología e Historia con un presupuesto cercano a los 8 millones de pesos, la cual concluyó en 2018 pero sin acceso al público, sin embargo pocos meses después cerró indefinidamente sus puertas debido a la pandemia del coronavirus.
Hasta el día de hoy la edificación continúa cerrada, pese a su importancia histórica y turística todavía no existe fecha para su reapertura.