La Iglesia Católica calificó como un "aspecto de desprecio" arrojar al mar de Veracruz las cenizas de personas que han sido cremadas, situación que ha sido prohibida a los feligreses.
"Que culpa tenemos nosotros que comemos el pescado fresco que tu vengas a tirar eso aquí", dijo el vocero de la Diócesis de Veracruz, Víctor Manuel Díaz Mendoza a aquellas familias provenientes de la ciudad de México que acuden a la zona conurbada a cumplir con dicha acción.