Niegan agresiones contra ejidatarios en Jiménez del Teúl

ZACATECAS, ZAC.- Tras el conflicto entre la Policía Estatal con ejidatarios y activistas en contra de la construcción de la Presa Milpillas, el secretario de Seguridad Ismael Camberos Hernández aseguró que fue la alcaldesa de Jiménez del Teúl quien solicitó la intervención de la fuerza pública.

"Hay un antecedente, había habido otra asamblea que algunas personas que no era ejidatarios, habían llegado a hacer desorden y a evitar que se diera la votación. Por ese motivo la presidenta municipal de Jiménez del Teúl mandó una solicitud que consistía en que se apoyara con la fuerza pública para llevar a cabo la asamblea".

Aunado a ello, Camberos Hernández minimizó las agresiones orquestadas este domingo durante la asamblea definitoria para la expropiación de tierras, hacia quienes se les negó el acceso -según afirmó- por órdenes de las autoridades ejidales.

"Sí hubo algunos roces ahí con manifestantes, pero no se llegó a la violencia, lo que hay nada más en los videos... Todo este operativo fue videograbado y también hay grabaciones de las personas y lo que ahí se observa no es abuso de la fuerza física, solamente se colocaron barreras y las personas, el comisariado ejidal, que decían que tenían derecho a pasar y participar en la votación y las que no, pues no pasaban".

Añadió que la acción que tomó Jorge Eduardo Cano Altamirano, subsecretario de Inteligencia Política Criminal y Vinculación Ciudadana, de arrebatarle un teléfono celular a la activista Grecia Rodríguez con el que grababa la situación, fue en defensa personal, pues ella lo golpeó primero.

"Si se observa ahí un elemento donde le trata de quitar o le quita el teléfono a una manifestante, ella había golpeado con ese teléfono a un oficial, pero eso fue lo que pasó, se habló, se dialogó y no pasó a mayores".

Meganoticias buscó la postura del secretario general de Gobierno, Jehú Salas Dávila, sobre los actos de violencia denunciados por los ejidatarios y la Red Mexicana de Afectados por la Minería (REMA) sin obtener respuesta por su "apretada agenda".